Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for the ‘VERSOS’ Category

Poesía de antaño

Medias alas y sus tintas

  • De presente a presente. Aquí y ahora, constancia queda
  • cada cual y su presente en uno solo.
  • Afloró con las primeras la primavera,
  • y en el sueño remoto del invierno ya vencido,
  • asomó la nostalgia, su pasado y su poema

 

  •  Un solo instante sucesivo,
  • uno solo como mota rodando,
  • remando, asomando lo nuevo y lo perdido,
  • y resolviendo en hechiceras interioridades,
  • la vía y su camino

 

  • Ya la proyección avisa. ya aventaja
  • el halo del polvo moteado de estaciones
  • al curso práctico del tiempo
  • Ya se adivinan
  • en las dinámicas variaciones de la rueda

 

  • Y el nombre contenido,
  • y la historia por ya escrita repetida
  • Y el destino trazado
  • y, hollado en el rodar,
  • la primavera rota en su esquina

 

  • Quizás San Juan la recomponga. Digo Juan,
  • digo Juno, digo Jano, digo vino en vano.
  • Alegría, rodar, sudar, buscar y buscar a ese ser,
  • sentirse algo divino y muy humano.

            Caricatura

  • Ángel vencido, de plumón acomodadado,
  • de luz difuminada en el sendero, en el camino entre las manos
  • con el corazón en vilo, acompañado y acompasado del sonido,
  • de las piedras desprendidas del mar divino a la existencia ilusoria,
  • de lágrimas pesadas con alas rotas.

Frater

Read Full Post »

Pluma, mano y cabeza

La pluma, la mano y la cabeza

  • No recuerdo en qué lugar,
  • ni a qué fin, ni en qué sazón,
  • se hallaron en un rincón,
  • reunidas al azar, 
  • una pluma muy usada,
  • una mano desprendida 
  • y una cabeza cortada.

 

  • Comprarlas quiso un inglés:
  • al verlas se aproximó 
  • y sorprendido quedó 
  • oyendo hablar a las tres. 

 

  • La pluma 

 

  • Olvidada duermo aquí;
  • pero aunque en el polvo estoy,
  • no me quita lo que soy 
  • la gloria de lo que fui.

  • La mano  

 

  • Mucho te enorgulleciste
  • y yo tu poder no acato,
  • que sólo de mi mandato 
  • dócil instrumento fuiste. 

 

  • La cabeza 

 

  • Callad: vuestro orgullo vano 
  • yo desharé como espuma.
  • ¿Qué fuera sin mí la pluma? 
  • ¿Qué sin mí fuera la mano? 

 

  • El inglés 

 

  • Dice la cabeza bien,
  • y sus razones son graves;
  • que plumas tienen las aves 
  • y el cerdo manos también.
  • Pero cabeza en que ardiente 
  • brille del ingenio el sol,
  • ¿quién la tiene? ¿Mucha gente? 
  • Los ingleses solamente 
  • y acaso algún español.

 

  • Lector, quienquiera que seas: 
  • De cuantas cabezas veas, 
  • pocas hallarás vacías;
  • pero diez tienen ideas, 
  • y noventa, tonterías

Read Full Post »

HIMNO AL SOL

HIMNO AL SOL

De Oliver Wendell Holmes

 

                 LA LUZ

¡Señor de todo ser!, distante entronizado,

ante tu gloria desde el sol y el astro;

Centro y alma de todas las esferas,

de cada amante corazón ¡qué próximo!

Sol de nuestra vida, tu rayo vivifica

y arroja a nuestra senda el resplandor del día;

Estrella de esperanza, tu luz enternecida

abriga de la noche nuestras largas vigilias.

A medianoche es tu ocaso sonrisas;

Tu graciosa alborada es nuestro mediodía;

El arco iris  es de tu gracia el rastro,

tuyo es todo ¡excepto las nubes del pecado!

Señor de toda vida abajo y en lo alto,

cuya luz es verdad y cuyo amor es cálido,

ante la llama inextinguible de tu trono

no suplicamos lustre como propio.

Danos tu verdad para  libres hacernos

y ardientes corazones que por ti nos quememos

hasta que todos tus vivos altares expresen

¡Una sola luz sacra, una llama celeste!

Read Full Post »

ODA A UN RUISEÑOR

ruiseñor

Me duele el corazón y un pesado letargo
aflige a mis sentidos, tal si hubiera bebido
cicuta o apurado un opiáceo hace sólo
un instante y me hubiera sumido en el Leteo:
y esto no es porque tenga envidia de tu suerte,
sino porque feliz me siento con tu dicha
cuando, ligera dríade alada de los árboles,
en algún melodioso lugar de verdes hayas
e innumerables sombras
brota en el estío tu canto enajenado.

¡Oh!, si un trago de vino largo tiempo enfriado
en las profundas cuevas de la tierra
que supiera a Flora y a la verde campiña,
canciones provenzales, sol, danza y regocijo;
¡Oh, si una copa de caliente sur,
llena de la mismísima, ruborosa Hipocrene,
ensartadas burbujas titilando en los bordes,
purpúrea la boca: si pudiera beber
y abandonar el mundo inadvertido
y junto a ti perderme por el oscuro bosque!

Perderme a lo lejos, deshacerme, olvidar
que entre las hojas tú nunca has conocido
la inquietud, el cansancio y la fiebre
aquí, donde los hombres tan sólo se lamentan
y tiemblan de parálisis postreras, tristes canas,
donde crecen los jóvenes como espectros y mueren,
donde aun el pensamiento se llena de tristeza
y de desesperanzas, donde ni la Belleza
puede salvaguardar sus luminosos ojos
por los que el nuevo amor perece sin mañana.

¡Lejos! ¡Muy lejos! He de volar hacia ti.
No me conducirán leopardos de Baco
sino unas invisibles y poéticas alas;
aunque torpe y confusa se retrase mi mente:
¡ya estoy contigo! Suave es la noche
y tal vez en su trono aparezca la luna
circundada de mágicas estrellas.
Pero aquí no hay luz, salvo la que acompaña
desde el cielo el soplo de la brisa cruzando
el oscuro verdor y veredas de musgo.

No puedo ver qué flores hay a mis pies
ni el blando incienso suspendido en las ramas,
pero en la embalsamada oscuridad presiento
cada uno de los dones con los que la estación
dota a la hierba, los árboles silvestres, la espesura:
pastoril eglantina y blanco espino,
violetas marcesibles recubiertas de hojas
y el primer nuevo brote de mediados de mayo,
la rosa del almizcle rociada de vino,
morada rumorosa de moscas en verano.

A oscuras escucho. Y en más de una ocasión
he amado el alivio que depara la muerte
invocándola con ternura en versos meditados
para que disipara en el aire mi aliento.
Ahora más que nunca morir parece dulce,
dejar de existir sin pena a medianoche
¡mientras se te derrama afuera el alma
en semejante éxtasis! Seguiría tu canto
y te habría escuchado yo en vano:
a tu requiem conviene un pedazo de tierra.

¡No conoces la muerte, Pájaro inmortal!
No te hollará caído generación hambrienta.
La voz que ahora escucho mientras pasa la noche
fue oída en otros tiempos por reyes y bufones;
tal vez fuera este mismo canto el que una senda
encontró en el triste corazón de Ruth, cuando
enferma de añoranza, se sumía en el llanto
rodeada de trigos extranjeros,
la misma que otras veces ha encantado mágicas
ventanas que se abren a peligrosos mares
en prodigiosas tierras ya olvidadas.

¡Olvidadas! El mismo tañer de esta palabra
me devuelve, ya lejos de ti, a mi soledad.
¡Adiós! La Fantasía no consigue engañarnos
tanto, duende falaz, como dice la fama.
¡Adiós! Tu lastimero himno se desvanece
al pasar por los prados vecinos, el tranquilo
arroyo y la colina; ahora es enterrado
en los calveros del cercano valle.
¿He soñado despierto o ha sido una visión?
Ha volado la música. ¿Estoy despierto o duermo?

                                         John Keats. (1795-1821)

Read Full Post »

BABAJI

BABAJI

Ama a toda la Humanidad

Ayuda a todo ser viviente

¡Se feliz! ¡Se cortés!

¡Se una fuente de alegría inagotable!

Reconoce a Dios y lo bueno en cada casa

No hay santo sin  pasado, ni pecador sin futuro

Habla bien de todos

Si no puedes encontrar alabanzas para alguien,

déjalo salir de tu vida.

¡Se original! ¡Se creativo!

¡Se valeroso! Anímate una y otra vez

¡No imites! ¡Se fuerte! ¡Se sincero!

No te apoyes en la muleta de otro

¡Piensa por ti solo! ¡Se tu mismo!

Toda perfección y virtud están

escondidas en ti – revélalas.

También hay sabiduría en ti – regálala al mundo.

Permite que el “Bien” te haga libre

Que tu vida sea como una rosa,

Silenciosamente habla el lenguaje del perfume.

                                  namaste

Read Full Post »

RUBAYYAT

Omar Khayyam , nacido en Nishapur, Persia (1048-1131) .

Poeta, matemático y astrónomo.

Se educó en Nishapur y en Balkh y se instaló en Samarcanda, donde finalizó un tratado de álgebra.

Bajo la protección del sultán Malik-Shah, hizo observaciones astronómicas para reformar el calendario, y dirige la construcción en Ispahá de un observatorio astronómico

Su fama en Occidente se debe a la colección de poesías en cuartetos versionados  por el poeta británico Edward Fitzgerald, en 1859

  *********    *********    *********Khayyam, Omar

    Procura que tu prójimo no tenga que sufrir de tu sabiduría.

Domínate siempre, no te abandones a la cólera.

Si quieres encaminarte a la paz definitiva, sonríe

al Destino que te hiere y no hieras a nadie.

        En este mundo, conténtate con pocos amigos.

No trates de que perdure la simpatía que puedas sentir por alguien.

Antes de tomar la mano de un hombre,

pregúntale si ella no te golpeará algún día.

      ¿Por qué te afliges, Khayyam,

sólo por haber cometido tantas culpas?

Tu tristeza es inútil.

Después de la muerte, sólo hay la Nada o la Misericordia.

       Admitamos que hayas resuelto el enigma de la creación. ¿Cuál es tu destino?

Admitamos que hayas podido despojar a la Verdad de todos sus ropajes. ¿Cuál es tu destino?

Admitamos que hayas vivido cien años feliz

y que vivas cien años más. ¿Cuál es tu destino?

        Los sabios y los eruditos más ilustres

han caminado por las tinieblas de la ignorancia.

Sin embargo, no eran los estandartes de su época. ¿Qué hicieron?

Pronunciaron algunas frases confusas y se echaron a dormir.

      Entiende esto: un día tu alma caerá de tu cuerpo

y serás empujado detrás del velo que flota entre el universo y lo desconocido.

En la espera: ¡sé feliz!

No sabes de dónde vienes. No sabes a dónde vas.

      El bien y el mal, aquí abajo, se disputan la ventaja.

El cielo no es responsable de la felicidad

o de la desgracia que el destino nos aporta. No des gracias al cielo

o no le acuses… Es tan indiferente a tus alegrías como a tus penas.

      ¿Acaso el creador formó a los seres para destruirlos?

¿Por qué son tan feos? ¿Por qué son tan bellos?

¿Quién tiene la culpa?

Yo no entiendo nada…

        En el torbellino de la vida, sólo son felices los hombres

que se creen sabios y aquellos otros que no tratan de instruirse.

Yo me he inclinado sobre todos los secretos del universo

y he vuelto a mi soledad envidiando a los ciegos que encontraba a mi paso.

      He tenido maestros eminentes. Me satisfacían mis progresos, mis triunfos.

Cuando evoco lo sabio que yo era,

lo comparo al agua que adopta la forma del vaso

y al humo que el viento disipa.

        Los sabios no te enseñarán nada,

pero la caricia de las largas pestañas de una mujer te revelará la felicidad.

No olvides que tus días están contados y que pronto serás la presa de la tierra.

Cómprate vino, llévatelo aparte y luego déjate consolar.

      Sobre la tierra abigarrada, camina un hombre que no es musulmán ni infiel,

que no es rico ni pobre. No venera a Alá ni a sus leyes.

No cree en la verdad. No afirma nunca nada.

Sobre la tierra abigarrada, ¿quién es ese hombre bravo y triste?              

(Traducción de Ramón Hervás, y en su homenaje) 

Read Full Post »

IF

Rudyard Kipling      

kIPLING

  Si en tu puesto mantienes la cabeza tranquila

cuando todo a tu lado es cabeza perdida.

Si tienes una fe en ti mismo que te niegan

y no desprecias nunca la duda que ellos tengan.

Si esperas en tu puesto sin fatiga en al espera.

Si engañado no engañas,

y no buscas más odio que el odio que te tengan.

Si eres bueno y  no finges ser mejor de lo que eres.

Si al hablar no exageras lo que sabes y quieres.

 

       Si sueñas y los sueños no te hacen su esclavo.

Si piensas y rechazas lo que piensas en vano.

Si tropiezas el triunfo; si llega la derrota;

y a los dos impostores los tratas de igual modo.

Si logras que se sepa la verdad de que has hablado

a pesar del sofisma del orbe encanallado.

Si vuelves al comienzo de la obra perdida

aunque esta obra sea la de toda tu vida.

 

        Si arriesgas en un golpe y lleno de alegría

tus ganancias de siempre a la suerte de un día

y pierdes, y te levantas de nuevo a la pelea,

sin decir nada a nadie de lo que es y lo que eras.

Si logras que tus nervios y tu corazón te asistan

aún después de la fuga de tu cuerpo en fatiga

y se agarren contigo, cuando no quede nada

porque tú lo deseas, lo quieres, lo mandas.

 

         Si hablas con el pueblo y guardas la virtud.

Si marchas junto a Reyes con tu paso y tu luz.

Si nada que te hiera, llega a hacerte la herida.

Si todos te reclaman, y ni uno te precisa.

Si llenas el minuto, inolvidable y cierto,

de setenta segundos que te llevan al cielo,

todo lo de ésta tierra será de tu dominio

y mucho más aún: serás hombre, hijo mio

Read Full Post »

LIPSIS

 

PITAGORASLOS VERSOS DE ORO” de PITAGORAS

1. Honra ante todo a los dioses inmortales del modo establecido por la ley.
2. Venera el juramento y también a los nobles héroes e iniciados de la Tierra.
3. Y lo mismo a los genios subterráneos, de acuerdo con los ritos tradicionales.
4. Honra a tu padre y a tu madre así como a tus parientes.
5. En cuanto a los demás, haz tu amigo a quien sobresalga por su virtud.
6. Se amable de palabras y útil de obras.
7. No te enojes por las faltas leves que cometan tus amigos.
8. Actúa según tus facultades, teniendo en cuenta que el poder está muy cerca de la necesidad.
9. Aprende que, por una parte, las cosas son así; y por otra, procura superar:
10. Primero la gula y después la pereza, la lujuria y la ira.
11. No cometas jamás ninguna acción vergonzosa
12. Ni con otro ni a solas, porque, ante todo, te debes respeto a tí mismo.
13. Sé justo en palabras y actos
14. No tengas como hábito comportarte sin reflexión.
15. No olvides que morir es el destino común de todos.
16. Y que es condición de la fortuna aumentar y disminuir, pues sus bondades son inciertas
17. Y que los sufrimientos que la suerte proporciona a los hombres proceden de los dioses.
18. Soporta pacientemente lo que te toque en suerte, y ni te quejes, ni te indignes.
19. Aunque conviene que corrijas este destino, reflexionando lo siguiente
20. Que el destino no da muchos de estos sufrimientos a las gentes de bien
21. Y en cuanto a las muchas palabras que pronuncian los hombres, unas buenas y otras no.
22. Que ellas no te turben ni ejerzan influencia sobre ti.
23. Soporta con paciencia y dulzura la mentira pronunciada.
24. Procura cumplir siempre lo que te voy a decir ahora:
25. Que nadie, ni con palabras ni con actos
26. Te induzca o convenza de que debes hacer o decir lo que no sea lo mejor para ti.
27. Reflexiona antes de cometer una acción censurable
28. Pues es propio de los hombres débiles, hablar neciamente y actuar  irreflexivamente.
29. Por tu parte, realiza lo que no te pueda causar perjuicio posterior.
30. Abstente siempre de lo que no conozcas.
31. Aprende todo lo necesario para que tu vida sea más feliz.
32. No conviene que descuides la salud de tu cuerpo
33. Procura descubrir la justa medida en comidas, bebidas y en el ejercicio.
34. Entendiendo por justa medida la que no te cause dolor.
35. Habitúate a llevar una vida limpia y decente pero sin lujos.
36. Procura no hacer aquello que pueda atraer la envidia sobre ti.
37. No gastes insensatamente, como los que ignoran la honesta proporción de lo bello;
38. Pero tampoco seas avaro. Lo mejor en todo es la justa medida.
39. Haz lo que no te perjudique, pero reflexiona antes de obrar.
40. No permitas que el dulce sueño cierre tus ojos
41. Sin haber examinado contigo mismo cada uno de tus actos del día.
42. ¿En qué he faltado? ¿Qué he hecho? ¿He omitido alguna obligación?.
43. Repasa todas las acciones que hayas realizado, desde la primera y sin olvidar ninguna.
44. Repréndete si has cometido algún acto vergonzoso y regocíjate con los buenos actos.
45. Práctica de este modo con todo tu esfuerzo  y medita en la tarea que reclama tu cuidado, pues preciso es que ames esta práctica con todo tu corazón.
46. Ella te pondrá en la senda de la divina virtud.
47. Te lo aseguro por quien a nuestra alma ha transmitido la Tetratkis, fuente de la eterna naturaleza
48. Pero emprende una sola tarea, tras requerir de los dioses que santifiquen tu esfuerzo.
49. Si pones en práctica estas normas, te convertirás en su dueño; Y conociendo la naturaleza humana, conocerás los lazos que nos unen a los dioses inmortales.
50. Y aprenderás a discernir  los elementos que se separan y los que permanecen.
51. Y conocerás, como es justo que se conozca, que la Naturaleza es una y en todo semejante.
52. Y así no esperarás lo que no puede esperarse, ni habrá secreto alguno para ti.
53. Y sabrás también que los hombres padecen los males que ellos mismos escogen
54. Porque son tan desgraciados que no ven el bien que está  a su lado.
55. Ni lo oyen, porque son muy pocos los que saben librarse de las desgracias.
56. Tal es el destino que ciega su mente, extraviando su espíritu,  como cilindro que gira
57. Van de un sitio para otro padeciendo males infinitos.
58. Triste compañera la discordia que los extravía sin que se percaten.
59. A la que es preciso no provocar, sino ceder para poder evitarla.
60. ¡ Padre Zeus!; tú podrías liberar a los hombres de innumerables males,
61. Con tan solo mostrar a cada uno la divinidad que lo guía.
62. Y en cuanto a ti, hombre, ten confianza, porque la raza de los mortales es de origen divino,
63. A quienes su naturaleza sagrada le revela los ocultos misterios.
64. Si en ello te interesas, y lo practicas disfrutará de sus beneficios.
65. Y tras haber curado tu alma quedarás libre de todos tus pesares.
66. Pero evita alimentos indicados en los libros de las Purificaciones y de la Salvación del alma.
67. Con tu razón, reflexiona sobre cada cosa.
68. Tomando como guía del carro de tu alma la recta comprensión.
69. Y una vez que te hayas liberado del cuerpo carnal, llegarás al éter impalpable
70. Y serás inmortal: un dios incorruptible. Y la muerte ya no tendrá sobre ti dominio alguno.

                           Existen varias versiones de los célebres versos de Pitágoras, siendo la más conocida la del filósofo Hierocles, quien añadió sus propios comentarios. La versión más esotérica la realizo Fabre Olivet

Read Full Post »